De viaje por los restos de la Guerra Civil

Llevaba tiempo deseando coger la bicicleta polvorienta que hacía años la había dejado olvidada en un cuartucho oscuro, pero nunca había llevado a buen plan mi deseo, ora por motivos ocupacionales, ora por motivos de desgana (los más habituales), ora porque eso implicaba hacer un lavado de cara completo a la vieja bicicleta.

 Un día de primavera en el que las fuerzas del universo se conjuntaron hicieron que me animara a coger la bici. La duda era ahora por donde dejaría galopar a la vieja bicicleta. Hacía tiempo que conocía el proyecto de recuperación de de los restos que la Guerra Civil había dejado tras su paso por la comarca de la Serena. Una de las rutas por la que se encuentran estos restos nace de un camino a las afueras de Campanario. Esta ruta histórica es la "línea del Frente Extremeño en el valle de Guadalefra". El valle de este pequeño río, afluente del Zújar, fue protagonista de las luchas de las tropas republicanas y franquistas en 1938. 

 Asi pues, con más ilusión que forma física, me encaminé a adentrarme en el pasado.

A la derecha, pasado aproximadamente unos dos kilómetros del inicio de nuestra ruta, me encontré con el primer vestigio, el Puente de Zangarrón en el que sólo quedan apenas dos pequeños pilares para dejar pasar las aguas de un pequeño arroyo.

Imagen 1. Puente de Zangarrón

Imagen 2

Tras la breve parada en el que pude contemplar la belleza de un paisaje despoblado tan solo roto por la presencia extraña de alguna intrusa encina que se veía a lo lejos, continué pedaleando la vieja bicicleta. Y cual fue mi sorpresa a final de una relajada bajada en la ruta, que a unos 15 metros a la derecha del camino, me encontré con los restos de un magnífico bunker. Fue construido por el ejército franquista, en las posiciones de la División 112 sobre el valle del Guadalefra. Sobre alguna de las troneras del bunker se parecia una inscripción que deja constancia de quienes ocuparon y construyeron sus muros: la 14 Compañía de Zapadores con el escudo de la compañía.

Imagen 3.Vista del Bunker

Imagen 4. Inscripción de la 14 Compañía de Zapadores

Imagen 5. Otra inscripción de la Compañía

Imagen 6.Vista interior del bunker

Finalmente, el final de nuestra ruta terminaba en el valle por donde discurre el río Guadalefra. Mientras me aproximaba a sus aguas se apreciaba los restos de lo que parecía haber sido un puente; había llegado al antiguo Puente de Tablillas. Los restos de este puente constituye la imagen de viva de las luchas de los dos bandos en el Frente Extremeño. Fue destruido y reconstruido en los sucesivos avances y retrocesos de los dos ejércitos. En la imagen 7 se aprecia la entrada al puente. Los cerros del fondo fueron las posiciones republicanas al otro lado del río. Unicamente quedan los pilares que han resistido al tiempo que representa que no debemos olvidar nuestro pasado.

Imagen 7. Entrada al puente. Al fondo las posiciones republicanas

Imagen 8. Pilates de puente de Tablillas

Imagen 9. Pilares desde el lado izquierdo del puente

Así pues, encantado de que las ruedas de la vieja bici pisara los avatares de un pasado turbio, el regreso se prometía mucho más duro, y aunque en los días siguientes tuviera unas agujetas que atravesaban mi cuerpo como un cuchillo, aquellas piedras  (insignificantes para muchos) volvieron a despertar de su largo letargo para mostrar su pequeña historia a los ojos ajenos del curioso. 

Fuente: http://www.1936laserenalosmonegros.es/rutas.asp